¿Qué es el sonambulismo?
¿Qué es el sonambulismo?Podemos definir el sonambulismo como un trastorno en el que las personas son capaces de realizar actividades tan simples como caminar o sentarse en la cama, u otras que requieran de más complejidad, como por ejemplo desvestirse, vestirse, abrir puertas con llave, e incluso conducir, mientras están dormidas.
Mientras una persona se encuentra sonámbula, sus ojos están abiertos, aunque no perciben lo que ven del mismo modo que si estuvieran despiertas. De hecho, pueden llegar a pensar que están en otro lugar.
Normalmente, estos episodios tienen una duración de unos pocos segundos o minutos, aunque pueden llegar a alcanzar o pasar los 30 minutos.
Tras este tiempo, el sonámbulo tiende a volver a la cama, aunque en ocasiones pueden dormirse en otro lugar distinto al habitual. Al despertarse, raramente tienen capacidad para recordar nada de lo acontecido.
¿Cuándo ocurre?
El sueño de las personas tiene varias etapas, que van desde la somnolencia, hasta el sueño más profundo. La etapa más propensa para padecer sonambulismo, es la que sucede durante las primeras horas, en la que el sueño es más profundo.
Si analizamos la edad en la que se produce, podemos determinar claramente que es más frecuente en niños de entre 5 y 12 años, aunque se puede padecer a cualquier edad.
¿Por qué se produce?
En el caso de los niños es fácil determinar el por qué, ya que los motivos más comunes suelen ser la fatiga, la falta de sueño y el estrés. En cambio, determinar el por qué en los adultos es más complejo, ya que interfieren más factores, aunque los más comunes son que el sonambulismo sea provocado por sedantes, medicamentos, alcohol, problemas médicos o trastornos mentales.
¿Es peligroso despertar a un sonámbulo?
Al contrario de las creencias populares, despertar a un sonámbulo no tiene una gran problemática, aunque se debe hacer con cierta delicadeza, ya que al despertarse se encontrarán desorientados por unos segundos.
¿Cómo puedes tratarlo?
En la mayoría de casos el sonambulismo no tiene un tratamiento específico, ya que suelen ser casos esporádicos que no producen grandes estragos.
En el caso de ocurrir con mucha frecuencia, es conveniente acudir a un especialista que ayude a determinar los motivos de forma más específica, dado que el sonámbulo es muy propenso a sufrir accidentes tales como tropezarse, caerse, o simplemente actividades que puedan tener riesgo físico para ellos.
Para minimizar estos accidentes, es ideal despejar las habitaciones de los obstáculos que el sonámbulo se pueda encontrar y cerrar puertas y ventanas.
Para evitar la aparición de estos episodios, es recomendable seguir algunas pautas básicas:
- Evitar estrés durante el día.
- Dormir con poca luz.
- Tener un horario regular.
- Orinar antes de dormir (tener la vejiga llena facilita estos episodios).
